Charlotte Brontë
«Creo en cierta combinación de esperanza y luz que dulcifica los peores destinos. Creo que esta vida no lo es todo; ni el principio ni el fin. Creo mientras tiemblo; confío mientras lloro.»- Charlotte Brontë
Mia Wasikowska ,como Jane Eyre ,en la versión cinematográfica de 2.011
Este año 2.016 viene marcado por muchas celebraciones, es un año muy literario. Entre ellas vamos a conmemorar el bicentenario del nacimiento de la escritora Charlotte Brontë.
Releer su maravillosa novela Jane Eyre, me ha parecido una manera genial de rendirla un homenaje…y como siempre, ¡un verdadero placer volver a Thornfield!
Detrás de esta gran novela se esconde una gran escritora : ) ¿Quieres conocerla?
Para ello tenemos que viajar a los páramos del condado de Yorkshire, allá por el año 1.800.Vamos a visitar la casa de los Brontë , en el pueblo de Haworth.
El hogar de los Brontë
Charlotte nace en Thornton, un 21 de abril de 1.816. Era hija de Patrick Brontë, un clérigo de origen irlandés y de Maria Branwell , y la tercera de seis hermanos: Emily,Anne, María, Elizabeth y Branwell.
El padre había sido aprendiz de tejedor, después maestro y finalmente clérigo. En 1.820 fue nombrado rector del pueblo de Haworth y se instala allí con toda su familia, en una casa lúgubre de piedra gris, junto al cementerio.
Sobre Patrick se cuenta que era un hombre extraño, excéntrico, obsesionado con la austeridad, un poco tirano y egoísta.Pese a ser muy pobre, había logrado la hazaña de estudiar en Cambridge.
Cuentan que era alto, guapo, pelirrojo y bastante culto; escribía y publicaba poemas y textos didácticos sobre religión, cartas e incluso artículos políticos. Aunque los rumores y la tradición siempre han hablado de un hombre severo, ultra conservador, una especie de monstruo que descuidó a sus hijas, existen discrepancias sobre el trato que daba a sus hijos.
Fue una gran influencia en el futuro artístico de las hermanas Brontë. Hablaba a sus niños sin paños calientes, los trataba como adultos; conversaban sobre temas de actualidad, les recomendaba libros y artículos del periódico. Puede que fuera un hombre bastante contradictorio y nada convencional, que miraba con buenos ojos la afición de sus hijas por la escritura, a Charlotte le permitía tener un cuaderno de escritura. Lo que si es cierto, es que se volcaba en Branwell, su hijo varón, e invirtió todo su dinero en darle una buena educación. Mientras, las niñas asistieron a terribles internados y se vieron obligadas a trabajar desde muy jóvenes.
Las mujeres en aquella época lo teníamos muy difícil, nuestras ocupaciones estaban muy delimitadas y ,por supuesto, no tenía cabida ninguna aspiración intelectual.
En el carácter de Patrick Brontë y en el de sus pequeños tuvo que influir de manera notable la pérdida de la madre, que murió en 1.820, tras siete meses y medio de una agonía muy larga. Nadie comentaba la muerte de la madre en casa.
La tía Elizabeth Branwell, hermana soltera de Mary, se instaló en la casa. Era una mujer seca, poco amiga de mimos y cariño. Se ocupaba de la casa y de los pequeños Brontë.
La casa de los Brontë
Siempre me he imaginado Haworth como un lugar muy melancólico, hermoso y triste. Los hermanos supieron evadirse de ese ambiente, creando su propio mundo maravilloso, lleno de libros, juegos y arte.
Después de un viaje a Leeds, Patrick regaló a Branwell una caja de soldaditos de madera. Esto cambió sus vidas, los pequeños crearon en torno a estas figuritas todo un universo, el Mundo de Angria
«Branwell vino a nuestra puerta con una caja de soldados. Emily y yo saltamos de la cama y cogí uno y exclamé “¡este es el duque de Wellington y será el mío!”. Cuando dije esto Emily tomó otro y dijo que sería el de ella. Cuando Anne bajó también tomó uno. El mío era el más bonito de todos. El de Emily parecía grave y lo llamábamos Gravey. El de Anne era una cosita extraña parecida a ella y se llamó Waiting Boy. Branwell eligió Bonaparte»- Charlotte Brönte
Angria fue fundada en diciembre de 1.827. Charlotte describió las islas que lo formaban. La capital era Glasstown. Charlotte y Branwell crearon Angria, mientras que Emily y Anne idearon Gondal.
Las historias de Angria y Gondal se escribían en pequeñísimas hojas de papel, con una letra microscópica, y solo se podían leer con lupa. Probablemente no querían que la tía Elizabeth se enterara de sus actividades, o bien pretendían que sus soldaditos pudieran leerlas : )
El mundo de Angria
Haworth
Las crónicas eran apasionantes, violentas y luminosas. Los hermanos tenían un código a la hora de escribirlas. Si Branwell, por ejemplo, mataba o casaba a alguno de los personajes, Charlotte tenía que respetarlo. Era como jugar a los dioses y para ellos, estos países imaginarios, eran mas reales que Haworth.
Se conservan algunos mini cuadernos de Angria, pero de Gondal no se ha encontrado ninguno.
Cuando pasó el tiempo requerido para el duelo por la muerte de la madre, Patrick empezó a preocuparse por el futuro de sus hijas, unas jovencitas muy inquietas, no muy guapas, inteligentes, tremendamente cultas, orgullosas y pobres. La vida se les presenta algo complicada. No podían acceder a la universidad. Una señorita decente, si no se casaba, solo podía aspirar a ser institutriz o maestra. Este trabajo estaba muy mal pagado y ellas lo que deseaban era escribir. Solo el hermano podía plantearse una carrera artística y Branwell, a pesar de que era apoyado en su vocación por la pintura, dará muchos disgustos a la familia por su tendencia a la bebida, a fumar opio y por sus relaciones con una mujer casada.
Las hermanas Brontë
El reverendo no quería para sus hijas un futuro como modistas o vendedoras, así que solo quedaba la enseñanza. Envió a sus pequeñas al colegio de Clergy Daughters, en Cowan Bridge (Lancashire). Las pequeñas vivieron un infierno, una pesadilla. Este colegio inspirará el famoso Lowood de la novela Jane Eyre.
El director de la escuela tenía ideología calvinista y obligaba a sus alumnas a rezar durante horas enteras, en ayunas y muertas de frío. Las mataba de hambre; la comida era incomestible y las condiciones higiénicas pésimas. Los castigos y humillaciones eran diarios. Las educaba en los severos conceptos del pecado y la culpa, todo era pecado. Las niñas tenían que enfrentarse a este entorno hostil, horrible, las mujeres no tenían ningún tipo de consideración social.
Las hermanas mayores María y Elizabeth murieron de tuberculosis. En el colegio nadie se ocupaba de la salud de las pequeñas.
La muerte de sus hermanas marcó para siempre a los Brontë.
El reverendo sacó a las niñas del colegio y durante los seis años siguientes no salieron de su casa, salvo para pasear un rato y jugar por los páramos de Haworth.
Continuaron educándose con su padre, cosían , leían y sobre todo escribían. La escritura les servía de terapia. Podía acceder libremente a los libros de su padre.
John Singer Sargent
Charlotte tenía el alma atormentada y triste, era muy apasionada. Arrastraba profundas dolencias físicas pero fue capaz de asumir el cuidado de sus hermanas Emily y Anne, con valentía y mucha fuerza.
A la edad de 14 años es enviada al colegio Roe Head. Charlotte teme la partida, está aterrada.Durante su estancia fue discriminada por sus compañeras debido a que su ropa estaba pasada de moda y a su miopía. No sabía nada de lo que se esperaba que tenía que saber una jovencita de su época, probablemente sabía mucho más.
A pesar de sus desventuras conoce a las que serán sus grandes amigas Ellen y Mary. Estuvo en este colegio un año y volvió a casa para continuar enseñando a sus hermanas.
En 1.835, la directora de Roe Head la llama para que ocupe un puesto de maestra. Charlotte vuelve y se lleva a Emily con ella.
Nuestra Charlotte odiaba ese lugar y su trabajo. Su sueño es escribir. Con 20 años le envió unos versos al poeta Robert Southey, que le contesto:
«La literatura no puede ser el objetivo de la vida de una mujer y no debe serlo»
Este comentario la lleva a una depresión e intenta resignarse. No puede y cae en un periodo de hipocondría y sufre un colapso nervioso. Vuelve a casa, después de dos años de trabajo y a la edad de 22 años.
En 1.842 las hermanas tienen intención de abrir una escuela privada, pero fue un fracaso. Para mejorar el francés, Charlotte y Emily ingresan en un colegio de Bruselas.
Alguien va a revolucionar la vida de Charlotte. Conoce al profesor Constantin Heger, el director de la academia. Heger la trata como a una igual y la estimula intelectualmente. La escritora se enamora en silencio.
Él estaba casado, era mayor que ella y tenía hijos. No fue un amor correspondido. Charlotte le enviaba románticas cartas, que el profesor intento destruir. Su esposa las rescató.
«Si mi maestro me retira su amistad, no tendré esperanza» – Charlotte Brontë
¡Qué ternura! y ¡qué valiente también! ¿no te parece?
Esta experiencia pudo inspirar la trama de su novela Villete, publicada en 1.853.
Charlotte y Emily eran dos estupendas maestras y el director las contrata para que impartan clases. Mientras Charlotte estaba encantada, Emily odiaba la ciudad, el colegio, al profesor.
La repentina muerte de la tía Elizabeth las obliga a volver a Haworth. Emily no tiene intención de volver a Bruselas, Mary ha entrado a trabajar como institutriz en una casa cerca de York y Branwell también marcha para trabajar allí. Emily se quedará como administradora de la casa.
Charlotte no puede soportar más estar separada de su adorado profesor y regresa sola a Bruselas. ¿Qué le gustaría de el?
Al parecer no era muy agraciado y era muy autoritario pero a ella le fascinaba. Heger la daba buenos consejos para escribir y era un lector atento a todo lo que la escritora le daba a leer.
Charlotte piensa que el profesor la ama, pero todo está en su imaginación. Después de seis meses se da cuenta de que su historia con Heger no va a llegar a ningún sitio y regresa a Inglaterra. La historia fue inspiradora de su novela El profesor.
By Ingres
En el otoño de 1.845 descubre que su hermana Emily escribe poesía y lo hace muy bien, es maravillosa. Las tres hermanas se deciden a autopublicar un libro con sus poesías.
¡¡Bravas!!.Se atrevieron a pensar por si mismas y a transgredir todas las normas.
Se edito con el título Poemas y los seudónimos de Currer, Ellis y Acton Bell (sus iniciales). Solo se vendieron dos ejemplares.
1.847 fue un año muy fructífero. Las tres hermanas publicaron sus novelas; Agnes Grey de Anne, Cumbres borrascosas de Emily y Jane Eyre de Charlotte.
Jane Eyre se editó con el seudónimo de Currer Bell y fue impactante, tuvo un éxito inmediato. Provoco un verdadero escándalo porque abordaba las pasiones y sentimientos de su protagonista, una mujer. En Londres todo el mundo hablaba de este relato y nadie podía imaginarse que podía estar escrito por una mujer.
En 1.848 muere Branwell de tuberculosis y Emily lo hace tres meses después. En 1.849 muere Anne.
Sola y desesperada tras la muerte de sus hermanas, Charlotte se queda en Haworth con su padre, dedicada a la literatura.
Conoce a su amiga, la escritora Elizabeth Gaskell, que escribirá una magnifica biografía sobre ella. Charlotte es ya un personaje muy famoso y es respetada por sus colegas. Sus novelas, Villete y Shirley , son un verdadero éxito.
En 1.850 se reedito la novela Cumbres borrascosas, con un adjunto de una selección de poemas de Emily y una biografía escrita por la propia Charlotte. La versión de la novela , que circuló hasta 1.963, fue la versión revisada de Charlotte, no la original de su hermana Emily.
En 1.854 y a pesar de haberse prometido a si misma que nunca se casaría (cuatro hombres se lo propusieron), se compromete con el reverendo Arthur Bell Nichols. El estaba muy muy enamorado de ella y Charlotte poco a poco aprendió a quererlo.
Edmund Blair Leighton
Fue feliz durante un tiempo pero al quedarse embarazada, enfermó de tuberculosis y murió el 31 de marzo de 1.855. Dejó sin terminar una novela titulada Emma.
Creo que será inevitable que caigas rendid@, Charlotte te va a enamorar. Anímate a conocerla .Abrir sus libros es una gozada, no te arrepentirás.
Me encanta la manera tan exquisita y expresiva que tiene de contar. Huye de sentimentalismos y noñerías. Es clara y directa, ingeniosa e inteligente. Brillante.
«La vida es demasiado corta para perderla en odios infantiles y en recuerdos de agravios». Charlotte Brontë